Tcuido ha tomado el desafío de mejorar la convivencia escolar desarrollando un nuevo canal de comunicación interno entre todos los actores de una comunidad escolar. Una vía efectiva para recibir las inquietudes y denuncias, informarlas y canalizarlas con el objetivo de
La construcción de relaciones entre los integrantes de una comunidad se basa en el respeto mutuo y en la solidaridad recíproca, que permite una interrelación armoniosa y sin violencia entre los diferentes actores y participantes. Una Comunidad Educativa que promueva el valor del respeto generará una convivencia escolar que vele por el proceso formativo para la educación y por el desarrollo de personas autónomas capaces de tomar decisiones y de anticiparse a las situaciones que amenazan o alteran el aprendizaje y la convivencia.
La recientemente emitida Ley sobre Violencia Escolar entiende la buena convivencia escolar como “la coexistencia pacífica de los miembros de la comunidad educativa, que supone una interrelación positiva entre ellos y permite el adecuado cumplimiento de los objetivos educativos en un clima que propicia el desarrollo integral de los estudiantes”.
La implementación de mecanismos y acciones que refuercen la alerta temprana sobre las conductas nocivas en la comunidad escolar, permitirá avanzar y mejorar la dimensión preventiva que es un elemento clave y que minimiza los riesgos a través de una actuación e intervención oportuna.
El bullying es una realidad que sufren niños, niñas, adolescentes y jóvenes en todo el mundo. Afecta su bienestar, su desarrollo y el ejercicio de sus derechos y responsabilidades.
El bullying es una conducta intencional, que se manifiesta en comportamientos o conductas repetidas y abusivas con la intención de infringir daño o herir a otra persona. Es una forma de violencia entre pares en el ambiente educativo. Se trata de acciones recurrentes que constituyen un maltrato físico o psicológico deliberado hacia un alumno, realizado por uno o más personas, cuyo objetivo es someter a la burla, hostigar, amedrentar, aislar o realizar agresiones físicas para obtener un resultado deseado o simplemente por divertirse a costa de otra persona.
En el bullying se identifica típicamente tres actores: víctima, un agresor o agresores responsables de esta conducta repetitiva y testigos de ella.
La consecuencia del bulling para la víctima es ver afectada su calidad de vida en el entorno escolar, desarrollando miedo y rechazo al entorno en donde es agredido, entre otras conductas.
Existen distintos tipos de bullying:
Psicológico: Aquellos actos que atentan contra la autoestima y fomentan el sentido de desprotección y temor en una persona. Este acoso puede expresarse de manera verbal o a través de medios de comunicación tecnológicos como celular, mail o chat (cyberbullying) o bien ignorando o excluyendo a la víctima (bullying pasivo).
Social: Conductas que afectan o que pretenden aislar a quien es víctima del resto de sus compañeros y entorno. Puede ser directo: excluir, no dejar participar a la víctima en actividades, sacarlos del grupo o indirecto: ignorar, tratar como un objeto, como si no existiera o hacer ver que no está ahí.
Verbal: insultos, ofensas, develación de secretos o menoscabo público a través de palabras que por ejemplo hacen burla de defectos y características personales dándoles connotación negativa.
Físico: Golpes, empujones, puntapiés u cualquier otro tipo de maltrato o agresiones físicas sobre un alumno u otro miembro de la comunidad escolar a modo de burla o menoscabo.
Si bien el Cyberbullying está considerado como parte de acoso psicológico, existen características que lo distinguen.
Cyberbullying: es el uso de los medios de comunicación tecnológicos y/o en red como (Internet, telefonía móvil y videojuegos online principalmente) para ejercer el acoso psicológico entre iguales. No se trata aquí el acoso o abuso de índole estrictamente sexual ni los casos en los que personas adultas intervienen.
Para construir juntos una mejor comunidad escolar basada en el respeto y cuidado.
Denuncia tu situación y a la persona que te acosa ante tus familiares, la entidad escolar o usando los canales que existen para ello.
Levanta la voz. Denuncia y reporta para que se investigue y se inicien los protocolos oportunos en tu establecimiento para que cese el acoso que recibes. Informa de lo que te está pasando. No olvides que no estás solo y que también puedes reportarlo anónimamente en la página Tcuido.
Rompe la ‘Ley del silencio’. Si eres testigo de una situación de acoso, tienes que informarlo. Si lo haces serás un buen compañero y no un soplón. No debes tener miedo a contar lo que pasa. Si observas una situación de ACOSO, no celebres, sino apoya a la víctima reportando la situación. Ayuda a romper la cadena y el agresor, al no verse respaldado ni apoyado, probablemente cesará su conducta.
Tu hijo, hija o familiar puede ser víctima, agresor u observador de una situación de ACOSO. Denuncia la situación de tu familiar y a la persona que le acosa o transmite tu preocupación si tu hijo ha sido testigo.
Alerta al Colegio. Comunica la situación de riesgo del que es víctima tu familiar oconocido a través de los canales habilitados por el colegio para que pueda intervenir oportunamente, investigar, e iniciar los protocolos pertinentes para que cese el ACOSO.
El mal comportamiento del alumno es fruto de la interacción con sus ambientes, los cuales influyen en su comportamiento y viceversa. Reporta usando los canales habilitados para dar a conocer las situaciones de riesgo para la convivencia, para que tu colegio pueda así iniciar los protocolos oportunos.
La mejor defensa es prevenir y educar para el desarrollo emocional y social de los alumnos. Implementar medidas y acciones que permitan mejorar la convivencia e identificar conductas de riesgo al interior de la comunidad escolar.
El respeto mutuo y la colaboración entre los distintos actores de la comunidad educativa es fundamental. La responsabilidad del mal comportamiento y conductas nocivas es fruto de la interacción de los ambientes interconectados en los que se desenvuelve el alumno. Intervenir apropiada y oportunamente contra el acoso y otras conductas que atentan sobre la convivencia, deben tener en cuenta a toda la comunidad escolar y social con la que el alumno interactúa.
Los casos de acoso que se identifican y corrigen son una buena oportunidad para desarrollar actitudes de solidaridad, apoyo mutuo, compromiso y desarrollo de las personas que pertenecen a una comunidad educativa.
Desarrollamos un canal de comunicación directo, seguro e independiente para recibir las preocupaciones y denuncias de incidentes y conductas que atentan contra la sana convivencia en tu entidad educativa. Escuchar, estar atentos a las señales y reportar es clave para prevenir y disminuir el bullying y otras conductas nocivas que afectan la convivencia entre los distintos actores de la comunidad escolar.
Co-creando una mejor comunidad escolar junto con la entidad escolar y sus miembros.
Apoyamos en el desarrollo e implementación de campañas y acciones al interior de la entidad escolar para la difusión y prevención del bullying y de otras conductas que dañan la sana convivencia escolar.
Apoyamos y orientamos a los miembros de la comunidad escolar niños, jóvenes, familias, docentes y centros educativos con un equipo de profesionales preparados para enfrentar y superar los problemas que afectan y atentan contra la coexistencia pacífica de los miembros de la comunidad educativa.
Implementamos evaluaciones y estudios para evaluar la convivencia y las conductas escolares al interior de los establecimientos y su comunidad de manera reservada y que protegiendo la opinión de los participantes, del colegio y de la comunidad en que está inserto.
Porque nos importa queremos contribuir a promover las mejores prácticas al interior de tu comunidad educativa.